Todos somos
el aire,
el agua
el grito
la venganza, la incierta desesperanza
la boca , tragando suerte arborecida
no a solas
abiertamente acompañados
y con suerte
de la mano de la inexistencia.
el aire,
el agua
el grito
la venganza, la incierta desesperanza
la boca , tragando suerte arborecida
no a solas
abiertamente acompañados
y con suerte
de la mano de la inexistencia.